viernes, 12 de abril de 2013

Eric Abidal, ejemplo de superacion

Éric Abidal es un ejemplo de superación no solo para los enfermos de cancer, lo es para todo el mundo en general.
Un pedazo de jugador y según dicen sus compañeros también lo es como persona, que a veces es mejor tener a un tipo positivo en un vestuario y que sea ajeno a los malos rollos antes que a un buen jugador.
El 15 de marzo de 2011 venia yo de jugar un partido y cuando volvia en el coche escuché por la radio que a Éric Abidal le detectaron un tumor en el higado, me quede helado nunca pensamos en que ese tipo de enfermedades le pueden tocar de repente a alguien cercano o conocido pese a que por desgracia es una enfermedad muy común y dura.
Al dia siguiente las portadas de los diarios deportivos daban animos a Éric Abidal, los jugadores del Barça salian a las ruedas de prensa abatidos por un noticia muy desagradable que nadie esperaba, donde decian que era el propio Abidal el que les daba animos a los compañeros quitandole más importancia al tumor de la que tenia para que se relajaran y jugaran lo que restaba de temporada con tranquilidad ya que lo que quedaba era muy duro.
Todo el mundo relacionado con el deporte reaccionó en apoyo a Éric Abidal, daba igual el color de la camiseta lo que importaba era que un jugador de futbol luchaba por su vida.
El 2 de mayo del mismo año que tuvo la enfermedad, volvio a jugar un partido contra el Real Madrid de Champions estando ya recuperado. Cuando terminó el partido los jugadores del Barça mantearon al que era el hombre de la noche, y el pase a la final de Liga de Campeones quedo en un segundo plano.
Semanas mas tarde Puyol y Xavi tuvieron el detalle de dejarle levantar El trofeo a el, ya que lo merecia por haber luchado tanto.
El 15 de marzo, justo un año despues tuvo una recaída, la noticia volvió a impactar aunque ya cogió tanto a sus compañeros como a el más maduros, todos confiaban ciegamente en que Abidal volvería a ganar al maldito tumor.
Efectivamente gano la batalla y hace menos de una semana volvia a jugar un partido oficial con sus compañeros, recibiendo por los aficionados cules una de las ovaciones más grandes que he visto en un campo de futbol.